¿Quieres adquirir el mejor polvo compacto para el rostro con el fin de camuflar las imperfecciones y lograr un efecto homégeneo? Estás de enhorabuena, te traemos esta comparativa. A su vez, encontrarás la guía que necesitas para comprender todo a cerca de los mejores polvos compactos para el rostro. ¿Suena bien, no?
¿Qué encontrarás en esta guía?
Los mejores polvos compactos para el rostro de Amazon
Ahora veremos cuáles son los polvos compactos para el rostro más populares en Amazon, además de las características más importantes en cada producto.
- Brocha compacta para el rostro, para aplicar y difuminar todo tipo de polvos sueltos y compactos
- La forma compacta del pelo garantiza un resultado uniforme, fácil y rápido
- Las cerdas naturales, suaves y de calidad superior, permiten difuminar las texturas de forma ligera y precisa, garantizando un resultado profesional
- La consistencia especial de las cerdas permite captar la cantidad idónea de producto y aplicarlo de manera óptima.
- La forma ergonómica y redondeada del mango facilita su sujeción y permite un perfecto control de los movimientos durante la fase de aplicación
- ⋨Con ingredientes nutritivos: el polvo prensado de larga duración está impregnado de ingredientes nutritivos, lo que lo hace cómodo sin sentirse seco. Es muy práctico.
- ⋨Usado en la cara o el cuerpo: el polvo compacto mate es adecuado para fijar el maquillaje en la cara o el cuerpo. La textura sedosa es perfectamente estable para fijar y terminar cualquier look.
- ⋨Imperfecciones invisibles de los poros: el polvo fijador mate es delicado y liviano con una textura suave que no obstruye los poros y puede hacer que su piel luzca perfecta.
- ⋨Mejora la pegajosidad de la piel: el polvo fijador de control de aceite tiene una sensación ligera. Puede mejorar la pegajosidad de la piel y garantizar un control natural perfecto del aceite. Es muy práctico.
- ⋨Muy resistente al agua: el polvo compacto para la cara es adecuado para el trabajo, las fiestas y las compras, incluso en deportes, pieles grasas o en días calurosos, no es fácil quitarse el maquillaje.
- Brocha kabuki para aplicar y difuminar polvos sueltos y compactos para el rostro
- La forma especial de la brocha kabuki permite captar la cantidad adecuada de textura y aplicarla de manera uniforme y precisa, evitando el desperdicio de producto
- Las cerdas sintéticas, muy suaves y compactas, garantizan un resultado homogéneo y una cobertura modulable
- La punta ancha de la brocha permite una aplicación fácil y rápida
- El formato hace que sea práctica para llevarla en el bolso
- Control de aceite y acabado refrescante: el polvo compacto absorbe la grasa de manera efectiva, brinda un acabado refrescante y ayuda a cubrir los poros para una tez perfecta.
- Solución de maquillaje de larga duración: Logre un maquillaje de larga duración con nuestro polvo facial que brinda un acabado claro y translúcido, lo que garantiza que el maquillaje difícil de quitar permanezca en su lugar durante todo el día.
- Uso multipropósito: nuestro polvo facial dorado se puede usar en la cara, resaltando los pómulos y varias partes del cuerpo, como la clavícula y las piernas.
- Regalo considerado: Nuestro polvo facial compacto es un regalo perfecto para amigos, familiares y seres queridos en cualquier ocasión, especialmente en cumpleaños, como un producto de belleza útil y versátil.
- Tonos versátiles y universales: adecuado para todo tipo de pieles, este maquillaje en polvo fijador viene en 2 tonos versátiles para satisfacer diferentes tonos de piel y mejorar la demanda para cualquier ocasión.
Factores decisivos para la elección de un polvo compacto
Entre todos los productos que existen hoy en día para el maquillaje diario, el polvo es quizás el que más dudas y perplejidades crea el uso. Alguien, por ejemplo, lo aplica en lugar de la base, directamente sobre la cara del desmaquillante; otros, por otro lado, lo compran específicamente de un tono más oscuro para usarlo como tierra bronceadora. De hecho, la confusión con respecto a este cosmético y su aplicación no debería ser sorprendente. Los polvos actualmente en el mercado vienen en forma de diversas texturas, pueden ser coloreados o completamente transparentes, opacos para corregir imperfecciones o brillantes para dar luz al rostro… En definitiva, la elección es realmente amplia y puede llegar a ser compleja, sobre todo cuando las ventajas y características específicas de cada tipo no están claras. Por esta razón, decidimos arrojar algo de luz sobre el tema: en esta guía de compra hablaremos sobre las funciones del polvo, los colores y tipos disponibles en el mercado y, finalmente, cómo elegir el polvo más adecuado en función de su tipo de piel. Sigue leyendo: ¡te garantizamos que al final de la página este cosmético no tendrá más secretos!
Polvo: ¿Qué es y para qué sirve?
Para realizar su función de manera óptima, el polvo debe ser invisible, pero esto no significa que su tacto no marque la diferencia. Por el contrario, cuando quieres conseguir una base facial impecable, este cosmético es fundamental: es precisamente el polvo, de hecho, el que te permite fijar el corrector y la base, asegurando una mayor estanqueidad al maquillaje; estos productos, de hecho, generalmente tienen una consistencia cremosa y, con el paso de las horas, tienden a derretirse y acumularse en los pequeños pliegues de la piel: la única forma de evitar el problema, por lo tanto, es secarlos con un polvo. De esta manera, el polvo también realiza una segunda acción importante: la de absorber el exceso de sebo, contrarrestando el antiestético efecto brillante que se forma en la llamada zona T de la cara (es decir, frente, nariz y mentón). De esta manera, el polvo iguala aún más la tez, haciendo que la piel sea compacta, aterciopelada y sedosa y minimizando la decoloración y las pequeñas imperfecciones.
Elige el color
Precisamente por su doble función fijadora y matificante, el polvo tradicional no debe utilizarse como sustituto de la cimentación, sino que se aplica posteriormente para hacer la última capa de la base facial. Como resultado, elegir el polvo correcto es crucial porque el producto incorrecto comprometería toda la base. Entre los principales factores a tener en cuenta a la hora de elegir, por lo tanto, está sin duda el color; según él, podemos distinguir entre dos tipos diferentes de polvo:
- Polvo transparente: está completamente libre de pigmentos de color y generalmente viene en forma de un polvo blanco que, una vez extendido, se vuelve transparente; por este motivo es un cosmético que se adapta a casi cualquier color de piel. Este polvo, por lo tanto, no está diseñado para alterar el color de la base, sino simplemente para fijarlo e igualarlo: por lo tanto, se aplicará a la cara al final del maquillaje para secar la base y garantizar la máxima estanqueidad. El polvo transparente, sin embargo, no es ideal para pequeños retoques, ya que, si se aplica solo en puntos específicos de la cara, corre el riesgo de crear halos blanquecinos.
- Polvo coloreado: a diferencia del primer tipo, contiene pigmentos de color y altera ligeramente el color de la base. Para no cambiar la base, por lo tanto, este polvo debe armonizar tanto como sea posible con el color natural de su tez; un color más claro, de hecho, le daría a la cara una apariencia pálida y opaca, mientras que uno más oscuro enfatizaría cualquier imperfección. La elección del polvo de color, por lo tanto, se basa en las mismas reglas relacionadas con el tono y el subtono que se aplican al corrector y la base (para obtener más información, puede consultar la guía de compra de este último producto). En general, sin embargo, aquellos con un subtono cálido deben apuntar a colores que tiendan al beige, caramelo o avellana, mientras que el subtono frío va bien con tonos más rosados, como el marfil, la arena o el cacao. A diferencia del polvo transparente, el polvo de color también es perfecto para dar pequeños retoques al maquillaje facial más tarde en el día.
Finalmente, hay un tipo particular de polvo llamado polvo correctivo; este último tiene la misma función que los correctores de colores y, a diferencia del polvo tradicional, no se aplica en todo el rostro, sino solo en los puntos que se quieren corregir: por lo tanto encontramos polvos verdes, adecuados para cubrir el enrojecimiento, el amarillo o el naranja, para corregir las ojeras en un matiz cálido o frío, o el púrpura / lila para dar vitalidad a la tez.
Fórmula y tipo de piel
Otro elemento que distingue a los polvos actualmente en el mercado y que, por lo tanto, deben ser evaluados cuidadosamente antes de la compra, es decir la fórmula, es decir la consistencia del producto; incluso en este caso, la elección depende esencialmente de sus necesidades y hábitos. Veamos a continuación cuáles son las fórmulas más comunes en el mercado y los métodos de aplicación más adecuados para cada una:
- Polvo libre: viene en forma de un polvo muy fino contenido en pequeños frascos. Delgado, ligero y delicado, este polvo es ideal para obtener un efecto aterciopelado sin agobiarlo, ya que es muy natural; por esta razón, el polvo libre generalmente debe usarse como el toque final de la base de la cara, para fijar la base. Para aplicarlo, puedes utilizar la chaqueta de plumón generalmente incluida en el paquete o, alternativamente, un cepillo en polvo: este último destaca por su gran tamaño y cerdas muy suaves, que le permiten igualar la tez a la perfección con un velo de producto (para aprender más sobre los pinceles de maquillaje, aquí puedes encontrar nuestra guía de compra).
- Polvo compacto: este tipo de polvo se presiona en una vaina y debe tomarse y aplicarse en la cara con el cepillo adecuado. El polvo compacto se puede usar no solo como un toque final a la base de la cara, sino también para dar pequeños y rápidos retoques a su maquillaje más tarde en el día. Al ser más compacto, este producto debe aplicarse y distribuirse con cuidado, para no crear manchas y halos; por otro lado, este tipo es mucho más cómodo de llevar contigo en tu bolso.
- Polvo de silicona: este tipo se encuentra entre los más recientes e innovadores y viene en forma de un gel incoloro que, una vez aplicado, se convierte en un polvo transparente, opaco y aterciopelado; el nombre de este producto proviene del hecho de que este polvo se basa casi en su totalidad en siliconas. Para aplicarlo, puede mezclarlo con un pincel o directamente en sus dedos.
- Polvo mineral: parece un polvo muy fino y delgado que, a diferencia del polvo libre tradicional, está compuesto únicamente por ingredientes de origen natural y no contiene siliconas, talco u otros productos químicos que, a la larga, pueden ocluir los poros y ser perjudiciales para la piel. También en este caso, el método de aplicación más adecuado es el edredón nórdico o el cepillo especial.
Para entender cuál es el polvo más adecuado, en realidad, también debemos prestar atención a nuestro tipo de piel: piel normal, seca, grasa o mixta, de hecho, corresponde a fórmulas más o menos adecuadas. En el caso de la piel grasa o mixta, en realidad, la elección es bastante simple: la función principal del polvo, de hecho, es precisamente absorber el exceso de sebo; por esta razón, incluso los polvos más tradicionales, como el polvo compacto o libre, serán perfectos. Más problemático es, en cambio, la piel seca, en la que se deben evitar los productos normalmente en polvo porque su consistencia tiende a resaltar el agrietamiento de la piel y, al absorber el sebo, a deshidratarlo aún más. Aquellos que no quieren renunciar a una base impecable, sin embargo, pueden comprar un polvo con un alto contenido de mica (un mineral) o maicena: estas sustancias, de hecho, matizan sin mezclarse con las grasas y aceites de la piel, manteniendo la hidratación natural de la piel. Alternativamente, incluso un polvo de silicona puede estar bien: gracias a la fórmula del gel, de hecho, el efecto de «piel seca» se minimizará. Incluso aquellos que sufren de imperfecciones particularmente obvias pueden centrarse en un polvo de silicona: su consistencia cremosa puede llenar incluso los poros más dilatados o las pequeñas marcas y arrugas de la cara, dando a la cara una apariencia suave y uniforme. Para aquellos con piel particularmente sensible, sin embargo, recomendamos un polvo mineral: al ser completamente natural, este tipo no obstruye los poros sino que deja que la piel respire, con el fin de evitar la formación de granos, puntos negros u otras inflamaciones.
Efecto final
Antes de comprar un polvo, no debemos olvidarnos de evaluar el acabado o el efecto final que queremos conseguir en nuestro rostro (lo que en inglés se denomina finish). Los más comunes son los siguientes:
- Polvo mate o mate: este tipo es ideal para pieles grasas, ya que ayuda a contrarrestar el efecto brillante; aquellos con piel seca, por otro lado, deben evitarlo, ya que correría el riesgo de acentuar las pieles y las grietas. Los polvos mate también son generalmente más opacos, por lo que también son perfectos para aquellos que sufren de imperfecciones o decoloraciones más obvias.
- Polvo brillante: tiene una textura más fina y ligera y contiene pigmentos reflectantes que hacen que la tez sea fresca, brillante pero con un efecto natural. Los polvos brillantes son ideales para pieles secas, ya que dan un aspecto nutritivo e hidratado, mientras que no deben usarse en caso de piel grasa, ya que resaltan zonas brillantes y poros dilatados.
- Polvo satinado: tiene un efecto luminoso pero menos evidente y, por este motivo, también se puede utilizar sobre pieles grasas, aunque sea con cuidado.
Los ingredientes utilizados
Para concluir nuestra guía para la compra de polvo, también es necesario hacer una breve consideración con respecto a los ingredientes cosméticos (en lenguaje técnico el INCI) normalmente contenidos en estos productos. El efecto mate y aterciopelado típico del polvo tradicional se obtiene generalmente a través de siliconas y/o talco, dos sustancias que crean una fina capa sobre la piel que la hace uniforme y tersa. Precisamente por esta razón, sin embargo, su uso frecuente corre el riesgo de obstruir los poros, impidiendo la transpiración adecuada de la piel: a la larga, esto conduce a la aparición de granos, puntos negros e inflamación. Los amantes del polvo, o simplemente aquellos que se preocupan por el bienestar de su piel, deben considerar comprar una alternativa natural: en el mercado hay de hecho varios polvos que crean el mismo efecto matificante, al tiempo que minimizan el riesgo de ocluir los poros. Estos cosméticos suelen basarse en sustancias naturales con propiedades absorbentes y matificantes: entre estas encontramos, como ya se ha mencionado, la mica, un mineral, y el almidón de arroz, dos sustancias ideales para la piel seca; luego están los polvos a base de sílice, u óxido de silicio (nada que ver con las siliconas mencionadas anteriormente), un mineral que da una piel de porcelana sin impedir que la piel respire. Una buena alternativa para la piel grasa, por otro lado, viene dada por los polvos naturales a base de caolín, un polvo de arcilla (también utilizado para mascarillas faciales) que absorbe el exceso de sebo y limpia la piel. Esto no significa, por supuesto, que no se puedan utilizar polvos tradicionales; nuestro consejo, sin embargo, es aplicarlos con moderación, con el fin de preservar la salud de la piel tanto como sea posible.